La localidad de Tossa de Mar, con poco menos de 6.000 habitantes, es un pueblo con encanto medieval, una de las joyas de la Costa Brava. En la “vila vella” (villa antigua) de Tossa de Mar tienes muchas sorpresas por descubrir, especialmente su icónico castillo, y también su entorno cultural y natural, su gastronomía, o el ambiente de los bares al atardecer.
Tossa de Mar tiene tres playas, por lo que es un lugar ideal tanto para unas vacaciones de playa y descansar, como para visitar otros rincones escondidos de la Costa Brava, como calas, pueblos medievales, o la cultura e historia de ciudades como Girona y Barcelona.
Todas las playas de Tossa de Mar tienen Bandera Azul, y son ideales para las vacaciones en familia en la Costa Brava.
El hotel tiene acceso directo a la playa de la Mar Menuda. La playa, que tiene una longitud de 180 metros, es más pequeña que la Playa Grande y por tanto, es más exclusiva. Esta playa está adaptada para el acceso de discapacitados y está equipada con todas las instalaciones necesarias. La playa de la Mar Menuda también es adecuada para hacer snorkel o bien iniciarte en el buceo.
La Platja Gran (Playa Grande) está a unos 200 metros del Gran Hotel Reymar. Es la playa principal de Tossa de Mar y está situada en el corazón del pueblo. Es la más activa de las 3 playas, desde donde salen los barcos que van a las calas, cuevas y localidades costeras de los alrededores. La Platja Gran de Tossa de Mar tiene 380 metros de longitud.
El Codolar es la cala más pequeña de las 3 playas (de unos 30 metros de longitud). Está situada detrás de los muros del castillo de Tossa de Mar, al sur de la ciudad. Esta cala era utilizada antiguamente como puerto para los pequeños barcos pesqueros de Tossa de Mar.